El licor de hierbas me sube la tensión

Pues eso.

Frase de la noche: "Mamiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii, otra copa".

Mientras escribo esto estoy escuchando: El Koala - Opá, yo viasé un corrá.

Ampliando y matizando el post de churra

Subtítulo: Los juzgados sí que son bares raros.

Nota para churra: Me he tomado la libertad de nombrarte, de usar tu post y de dar mi punto de vista acerca de lo que escribes. Espero que no te moleste.

Llevo tres o cuatro meses aficionado a la lectura de un weblog llamado Churra 103, está bien escrito con un lenguaje más que correcto, con cada cosa en su sitio y tal, se nota que sabe de lo que habla y sus pensamientos se asemejan bastante a los míos. Si no lo pongo en la parte izquierda en el apartado de 'Otros blogs raros' es más bien por dejadez que por otra cosa. Lo tengo en tareas pendientes.

Al visitar a Churra he leído su último post: Uniformes me he dado cuenta de que los abogados también beben. No era de extrañar, algo tendrán que hacer para soportar a los clientes que como yo he soportado, soporto y soportaré. Estoy harto de los: "Yo he sido...", "Tengo mis derechos", "Eso lo haces como digo yo y no como dices tú", y mi frase favorita: "... como es su obligación." Ella lo resume perfectamente en: "El cliente siempre tiene la razón".

También se les ha de eximir de culpa en su alcoholismo, transitorio o no, al ver las 'injusticias' que se llevan a cabo en los juzgados o en la vida real. El hecho de que para que un juicio se celebre tengan que pasar dos años y que una vez se celebre el juez se dedique a no hacer caso ninguno a las partes ni a los testigos es inaceptable. Es que yo creo que hay veces que se leen la demanda diez minutos antes de entrar en la sala de juicios. Y luego, ya si eso, dos años después de haber contratado al abogado para ir a juicio emiten una sentencia que ni ellos mismo saben de donde la han sacado. Claro que tampoco les culpo, sobre todo por las auténticas gilipolleces que dicen algunos abogados en las audiencias previas o en los juicios.

Y es que eso es, queridos lectores, un abogado. Una persona que se pelea a muerte por los intereses de su cliente, un mercenario que vende sus palabras a aquel que esté dispuesto a pagar sus honorarios, un estudioso de mil y unas sentencias que crean jurisprudencia (la gente se piensa que el abogado sólo trabaja yendo al juzgado a matarse contra otro compañero) una persona que conoce el sistema y que se aprovecha de todas las triquiñuelas habidas para librar al cliente demandado o hacer prevalecer los derechos de la parte actora. Esto los incluye a ellos mismos porque en este país el que hace algún mal tarda en ser castigado por sus pecados e incluso se puede dar el caso de que nunca sea castigado. De esto último no tienen culpa los abogados, el sistema es así y ellos no lo crearon. Simplemente NO HAY JUSTICIA.

A mi cuando escucho el: "Te voy a demandar" o el "Voy a demandar a..." me entra la risa; en ocasiones he dicho en plan chulesco el: "Sí, sí por favor. Ya tiene mis datos y si no los tiene se los facilito encantado. ¿Le muestro mi DNI? Los abogados se pondrán contentos al cobrar más." Esto se podría contestar más educadamente: "Huy! Pocos juicios tenga usted y los gane" pero es que hay veces que se tienen que aguantar demasiadas tonterías y uno termina explotando.

Y es que no os creáis que los abogados son caros. Para eso están las costas. No hay abogados buenos ni malos, ni caros ni baratos. Un abogado cualquiera puede ganar un juicio a uno que haya cobrado por el mismo trabajo o incluso menos diez veces más. Tampoco creáis que se saben todas y cada una de las leyes ni todas las sentencias. El Derecho es tan amplio que sólo puede haber personas especializadas en ciertas ramas. Simplemente son personas como cada uno de nosotros.

La otra cosa, aparte de su carácter mercenario explicado anteriormente, que me fastidia, enerva, jode, da por culo y más palabras malsonantes es el aire de colegueo que se traen entre ellos cuando están fuera de una sala de juicios, esto incluye la puerta de la propia sala. Churra lo llama paradoja. Yo lo llamo falsedad. Me explico. De cara al cliente muestran una cara seria, responsable, hacen creer cosas que no son tanto al juez como al cliente, esto incluye salvajes duelos dialécticos dentro de una sala; y en 'petit comité' sólo les faltaba irse de copas; ahora sé que lo hacen.

Terminando diré que ojalá yo pudiera ponerme una toga en mi profesión y que cada día que pasa tengo más ganas de estudiar Derecho. Mientras me lo pienso seguiré yendo a bares raros para olvidar este sistema que hemos heredado y que no hacemos nada por cambiar.

Mientras escribo esto estoy escuchando: Cindy Lauper - True colors.

El albañil que puso un bar

Manolito el 'argañil' se ha presentado esta mañana en mi casa a horas intempestivas a fin de realizar una modificación en un mueble de escayola para poder hacer sitio a mi reciente adquisición. No era plan de no abrirle, sobre todo cuando para que Don Manolito te atienda tienes que rellenar no sé cuántos formularios, dejarle el móvil sin batería y rezar tres ave marías y un padre nuestro.

Después de los pertinentes saludos típicos de: "¿Cómo te pintas el pelo de esa manera?" y la correspondiente réplica: "Yo por lo menos me lo puedo pintar, no como tú que debes de ser donante" se ha puesto a la labor de probar si la adquisición cabía en el sitio designado y en mitad de la operación le ha sonado el móvil (Manolito es capaz de coger el móvil mientras está boca abajo en un andamio en pleno derrumbe) y transcribiré parte de la conversación: "Sí, sí. De botellines 50 cajas. Vino como si no hubiera mañana". Mientras hablaba me ha dado por pensar que o estaba montando el macrobotellón 2 o que era uno de los nuestros, de los borrachos.

Así que cuando ha colgado le he preguntado que si tenía un bar. Me ha contestado que sí, que lleva un mes con él. Que lo había alquilado con la licencia y que lo había abierto a ver si le daba dinero. No si... Al final a todos nos da por lo mismo.

Mientras escribo esto, estoy escuchando: Bordón 4 - Caramelos.

¡Qué bar más caro!

Subtítulo: -¿Qué se bebe en Suiza? - Nada, es muy caro.

Mis peripecias alcohólicas me llevaron este fin de semana largo a la siempre controvertida Suiza y, para más señas a Ginebra, paraíso de las cuentas en bancos cuya información al fisco español deja mucho que desear y los relojes. Íbamos a ver al recién estrenado papá Francesco, amigo de la infancia neoyorkina de Shinchán aka El Capitán Pescanova aka Labordeta (dependiendo de su atuendo)

Antes de continuar con la narración de mis peripecias, me gustaría dedicar este párrafo al HIJO DE PUTA (Sí, con todas las letras mayúsculas y en negrita) que ha diseñado la terminal 4 del Aeropuerto de Barajas. ¿Qué os podría contar que os hiciera llevaros las manos a la cabeza? Por ejemplo, que para llegar a determinadas puertas de embarque hay que coger un chiquitren conducido automáticamente, que desde que te bajas del avión hasta que coges tu maleta pasa hora y media, que subes y bajas mediante escalera mecánica lo equivalente a un sexto piso, que por donde sale tu maleta salen las maletas de seis vuelos a la vez mientras en la de al lado no sale ni una, que como no cojas tu maleta la primera vez que la veas puede pasar 10 minutos hasta que la vuelvas a ver, que han inventado un nuevo puesto: el coordinador de taxis... No sigo que tampoco os quiero asustar, sólo diré que podían haber hecho un aeropuerto en Guadalajara y llamarlo así: Aeropuerto de Guadalajara; y no engañar a la gente diciendo que es una nueva terminal.

Una vez llegamos a Ginebra y asentados, nos dirigimos directamente a un bar, allí llaman Brasserie a un bar donde ponen cervezas y comida y nos pedimos una muestra de cervezas donde estaban la blanca, la rubia, la morena, la pinta, la niña y la santa maría. Yo pensé desde el más puro alcoholismo que si pedíamos 3 de esas muestras pues estábamos servidos pero parece ser que estaba feo, así que pedimos jarras de 1 litro de cerveza. Amigos, hay que hacer ejercicio para beberse eso, a mi me costaba levantarlo.

Sin saber muy bien como aparecimos en un supermercado japonés, sí, allí cada cultura tiene su supermercardo. El super español estaba, junto con dos oficinas del BBVA y del Santander en el barrio de las 'prespiputas' que como todo el mundo sabe ejercen la 'prespipución'. Los compañeros me preguntaban que qué me pasaba que si estaba pedo, yo contestaba: "No estoy pedo, estoy como muy raro".

Andando y andando, viendo y viendo piedras y más piedras me di cuenta de que todo era muy caro, pero caro, caro de cojones. Eso sí, las chatis muy buenas. Que me desvío. Por la noche, Francesco y Megumi nos invitaron una típica comida suiza en su casa, la raclette. Excelente manjar, básicamente es queso derretido en una parrila que se echa sobre patatas cocidas con pimienta, pepinillos y cebollitas. Después de eso, nos fuimos a ver la noche suiza, yo estaba como loco pensando en las locuras que nos deparaban, craso error, 18 francos suizos (11,75 €) costaba un cuba libre suizo, que es media cubata español y encima con un ron malísimo. Encima, fuimos afortunados porque no nos cobraron entrada. En fin, queridos lectores, que los cubatas os los bebéis en España mejor.

Al día siguiente estuvimos Labordeta y yo andando y andando visitando la Universidad, más piedras y el Lago de Ginebra con su jet d'eau, que es algo así como un chorro del copón bendito. La verdad es que Ginebra es bonito, pero cojones es que no hay ni un sólo bar ni raro ni normal, no podíamos saciar nuestra sed en ningún lado. Por fin llegaron Francesco, Megumi y el pequeño Max que nos llevaron en un largo viaje (-Aquí los kilómetros son más largo, ¿no? -Sí 1,5 más o menos) a las bonitas ciudades de Lausanne y Montreux. Por cierto en el casino de Montreux, demostré que mi teoría para ganar siempre en el casino no funciona, o por lo menos en la mesa en la que estoy yo no funciona. En las demás funcionaba.

En resumen, que muy bonito todo pero no vayáis con sed.

Mientras escribo esto, estoy escuchando: Ella baila sola - Despídete.

OPA's amistosas, hostiles y de exclusión

Subtítulo: Me cago en César Alierta y en toda su descendencia.

Para el que no lo sepa una OPA es un instrumento mediante el cual un comprador realiza públicamente a los accionistas de una sociedad, una oferta de compra de sus acciones, a un precio superior al del mercado, para hacerse con el control de la misma.

Ahora vamos a extrapolar esto al mundo de los borrachos donde yo me hallo. Suponte que eres un borracho pequeño, de esos que despuntan buenas maneras en esta cultura del beber y te llega un borracho profesional y te dice: "Te vendo mis botellas a este precio." Aceptas porque te han dicho que es un buen negocio (lo que pasa es que quien te lo ha dicho ha sido una marioneta del borracho profesional) y porque oye, la idea de tener tus botellas siempre te ha gustado.

Pasa el tiempo y tus botellas resulta que son una mierda, incluso llegan momentos en los que tus botellas llegan a valer un tercio de lo que te costaron. Tú mientras aguantas el tipo, haces como que no lo ves y dejas pasar el tiempo. Un buen día te llega alguien que puede ser uno cualquiera o incluso el borracho profesional que te las vendió hace 5 o 6 años y te dice: "Te hago una OPA". Tú dices: "¿¡Lo qué!?" Entras al weblog de Julki y buscas este post y piensas me harán una oferta superior del precio que pagaste ya que te has tirado 6 años aguantando el tipo y porque la botella ahora tiene solera.

La OPA puede ser de tres tipos:

  • Amistosa: Negocias el precio de la botella con el comprador. Al final, todos salis ganando.
  • Hostil: "Te voy a pagar esto por las botellas y ni un duro más". Si aceptas bien si no ya aceptará otro.
  • De exclusión: "Me da igual lo que digas, te voy a a pagar esto te guste o no y demás da igual que aceptes o no porque te quito tu derecho a las botellas. Además te voy a pagar cómo me plazca."

Pues esto último ha pasado hoy con Telefónica Móviles, ha llegado Telefónica con el malvado César Alierta a la cabeza y me va a comprar mis botellas a un precio inferior del que le pagué y encima me va a pagar con botellas peores. Y lo único que puedo hacer es contaroslo aquí, llorar y patalear. ¿Sabéis lo qué os digo? Que la próxima vez va a ahorrar quien yo me sé y según compre las botellas me las voy a beber.

Mientras escribo esto estoy escuchando: Antonio Flores - No dudaría.

Hemos inventado el número 5

Calculando cuántos kilómetros se pueden hacer con un coche nos dió por hacer la bonita división: 100 entre 18. Hacedla y seguid leyendo. Por el culo te la hiiiinco.

Ayer empezamos intentando hacer borrachera de investigación yendo a un nuevo bar gallego llamado O'Ribeiro (calle Galileo esquina Joaquín María López). El bar se puede calificar como de puta mierda y encima caro. Raciones nada generosas, cosa rara en un bar gallego. Vamos que no vayáis que es no es el bar de vuestra vida. Lo mejor, la gente que conocí. Chabis, Evo Morales y del otro no se me ocurre el nick.

Luego fuimos a un bar que estaba al lado que supongo que no he hablado nunca de él: Pool and beer (no confundir con la tienda de ropa) en la calle Joaquín María López, divertidísimo, los camareros de lo mejor que te puedes encontrar en la noche. Depende del día que vayas puede estar Ali con el ritmo rabaTanga o el rockero trasnochado. No diré cuál es el mejor, que eso depende del gusto de cada uno. El baño daba miedito y eso que le dije a todo el mundo que no tirara de la cadena, pues nada que la gente tiraba demostrando exquisita educación y a la vez estulticia. Las cataratas del Niágara, apigos.

Me voy a despedir con la gran frase que pronunció el hombre sueño a Evo Morales: "¿No sabes lo que es una vida paralela?"

Mientras escribo esto, estoy escuchando: Hip hop tribute to Aerosmith - Walk this way.

Momentos blackout

Blackout = Apagón.

Que Taladrin de la Mancha monta una fiesta en su casa... Pues todos a quemarla. Que no, que no, que es broma. Lo que no es broma es que me gustan los cuadros que hay en su casa y que se los voy a robar a la madre, pero lo tengo que hacer con nocturnidad y alevosía (si no, no mola) y no delante de 20 o 30 personas, que entonces tengo demasiadas bocas que callar.

En los años 60 y 70, nuestros padres llevaban a los guateques (fiestón en antiguo castizo) el tocadiscos, sus álbumes favoritos y Mirindas. Pues como la teconología avanza una barbaridad nosotros llevamos la Play 2, los micrófonos y el juego del Singstar. Y mientras nos tomamos las renovadas mirindas (ahora son 5 minis de ron con cocacola) nos da por cantar mientras miramos la pantalla emulando a los grandes como Milli Vanilli y Rick Astley.

En esto que yo que soy bohemio y con espíritu burlón, estaba hasta los mismísimos de oir los alaridos (porque hay gente que se cree que canta bien y no quiero acusar a nadie), así que junto a Perpetuo (otro que ya tiene nick) ideé un plan... El momento blackout.

Consiste básicamente en buscar los plomos de la casa y bajarlos. No tardamos mucho pero necesitábamos una vía de escape para no ser descubiertos así que al lado de los plomos había una especie de despensa. Ya teníamos vía de escape. Fuimos con nuestros minis tranquilamente pasando delante de la play2. La gente no reparó en nosotros (¿a quién le iba a importar dos borrachos si estaban cantando una canción de La oreja de Van gogh?) Nos metimos dentro y esperamos a que se olvidaran de nosotros y entonces metí a Perpetuo dentro de la despensa, bajé los plomos y me metí cerrando la puerta en la despensa.

Se oyeron gritos de desesperación al no poder interpretar sus temas favoritos, algún que otro grito de violación y nuestras risas contenidas dentro de la despensa. En eso que me pongo a encender el mechero y a Perpetuo le entraba la risa yo le decía entre risas que no se riera. Volvieron los plomos pero no nos dimos cuenta y ya salimos de la despensa indignados porque nos podíamos haber muerto allí y nadie se habría dado cuenta...

Mientras escribo esto, estoy escuchando: DosHermanos - Format C:

Kelifinder

No, en serio que no me lo he inventado. Os lo prometo, que lo podéis ver aquí. Y es que esto del kelifinder realmente es verdad. Que si es una estupenda manera de publicidad, que si es producto del marketing más agresivo... No es por picar, pero otros en esta situación deberían manifestarse y no por la 'tontería' (entre comillas simples) de lo de las víctimas del terrorismo, esto es mucho peor, que se ríe de toda una generación de sanchiguarros que quieren un piso de precio tasado. Yo pediría la cabeza de la Ministra de la Vivienda (¡Anda! Que hay Ministerio de la Vivienda, como con Franco) en bandeja, que se está riendo de nosotros.

Y tampoco es por picar pero el sueldo medio está como hace 9 años, sólo que encima hay más situación de temporalidad (¡Gracias! Bendito contrato en prácticas). Pero nada, nada... A seguir votando al PSOE.

Bueno, que esto no va de lo que se supone que tiene que ir. Hoy he estado en: "El callejón de Álvarez Gato" (c/ Elfo número por determinar) No he hablado antes de él básicamente porque el nombre del bar se las trae... Que es imposible de recordar. Un bar muy divertido y altamente recomendable. El camarero-jefe tiene miedo de los borrachos y se sale de la barra perseguido por los clientes. En serio, que tenéis que ir.

Mientras escribo esto, estoy escuchando: Marilyn Manson - Sweet dreams (Puuunkooos! Punkoooos!)